de miércoles a viernes

Aún me tiemblan las piernas y ando raro del esfuerzo y las agujetas que tengo del miércoles en capoeira. Paso a un lado-pierna-patada lateral-abajo-defensa-arriba-ataque frontal-abajo-defensa al suelo-voltereta-giro-arriba y vuelta a empezar hacia el otro lado y sin perder el ritmo, y venga, y una vez, y otra, y de nuevo, y ahora por parejas, y ahora en corro, y ahora cantando y dando palmas... ufffffffffffffffffffffffff... La vuelta del profe de Brasil ha sido contundente. Qué cuerpazo tiene el tío y él que lo sabe, se quita siempre la camiseta.

El jueves de picnic en Salburua con mis compañeros del laboratorio (S., V. e It. I. está de baja el pobre). Tortillas de patata (Chave, aún tienen mucho que aprender de las tuyas...), ensalada de pasta y otros complementos de colores (la hice yo, jejeje) y macedonia de frutas (ummmmmmmmmm, qué bien entraba...). Volvimos los cuatro al curro con la nariz y los papos rojos del sol. La próxima semana repetimos (si las inclemencias del tiempo no nos aguan el planazo).

Hoy por la tarde con E. en su coche a Bilbo. (La mañana una mierda. Entre otras cosas porque mi jefe con su falta de tacto me ha venido a decir en tono jocoso que en Abril, eso, que definitivamente a la calle). Reencuentro y cañas con varios amig@s que conocí y con los que conviví cuatro inolvidables meses en Escocia (Es., J., F., E. y M. -sí, la misma M. que estaba en aquella primera foto que te mandé, Chave :P - ). Qué risas, qué a gusto, qué recuerdos y qué corto se me ha hecho... Es una pena que sea tan difícil volver a vernos tod@s, pero bueno, hoy nos hemos juntado seis. ¡Algo es algo!

Y ya estoy en casa muerta de sueño y echo de menos el roce de tu piel, tu regazo, tus besos... Me voy ya a la cama, a soñarte. Mañana más. Estoy hecha una "viejuna" -que dirías Tú- pero es que después de toda la semana madrugando llega el viernes y estoy que me caigo de cansancio...