viernes, 13 de agosto de 2010

Al abrigo

He vuelto a sentir el placer esta noche de arroparme para no tener frío. Mi pena es... que no ha sido Contigo... pero sé que tú también lo has sentido.
Estoy más a gusto que nunca en mi casa de toda la vida, pero también con más ganas de volver y abrazarte que nunca. Y tú encima malita...
Esta mañana no he salido. He estado buscando las partituras de las canciones de gospel (¡las encontré!), enseñándole a mi padre las fotos de este verano (ayer estuve charlando hasta las mil con mi madre y al final ella no las vio), viendo en la tele un mini reportaje del lince que me había grabado mi padre (¡está en todo el tío últimamente!), poniéndome al día con los emails (E. me ha reenviado los últimos del mentecato éste)... y también he estado un ratito releyendo el diario que me fue escribiendo mi madre cuando yo era pequeña. Me parto de risa... Y al hilo de esto último, a la vuelta te tengo que contar una cosa que ya me impacienta :) ¡qué ganas!